El juego

La utilización del juego responde a los siguientes objetivos:
La creación de lazos sociales, puesto que aporta sentido de grupo, unión, seguridad y cooperación entre los jugadores, y ello facilita la construcción de un ambiente adecuado para abordar aspectos de trascendencia para cada uno de los que participan.
El desarrollo cognitivo, puesto que el juego contribuye al aprendizaje y la comprensión.
La expresión de emociones, ya que las representaciones utilizadas en el juego son, de hecho, representaciones del conocimiento afectivo y emocional de quien juega.
El juego facilita que las personas se expresen, que creen y saquen todo lo que tienen en su parte consciente e inconsciente, y en su parte emocional y racional.
